¿Qué es lo peor que te puede pasar en la vida?, ¿sacarte una mala nota?, ¿perder tu tarjeta de crédito?, ¿que tu novia te deje plantado? no, lo peor de la vida es irte al descenso.
El Club Atlético River Plate, el equipo más laureado del fútbol argentino, que posee dos Copas Libertadores, uno de los clubes más famosos de Sudamérica y el mundo, tocó lo más cercano al infierno. Razones hay mucha, mala dirigencia, jugadores sin amor por la camiseta, etcétera, etcétera... lo claro es que el año 2011, "La Banda" dejó de pisar los pastos de la Primera División, y visitó los potreros de la B Nacional.
Atrás quedaron esos tiempos gloriosos de La Máquina, los goles de Ángel Labruna, Alfredo Di Stéfano, el "Beto" Alonso, Enzo Francescoli, el "chileno" Salas, las tapadas de Amadeo Carrizo, y el temperamento de Daniel Passarella. Todo se fue, junto con el sueño de la permanencia. Uno de los hechos más impactantes de la historia del fútbol mundial, que tuvo resonancia en todo el planeta, porque "Los Millonarios", en su estadio, ante 65.000 personas, se iba al descenso. Sí, yo tampoco lo puedo creer, lo que nadie quiere vivir, el fantasma al que todos quieren evitar visitó el Monumental de Núñez, y se llevó al mejor equipo argentino del siglo XX.
Pero la realidad hay que afrontarla, como lo hicieron los jugadores e hinchas de River, jugaron en Segunda, y ¿qué pasó? eso se explica en "River Plate - En las malas, mucho más", la película dedicada a la misión retorno, al paso del equipo por la B Nacional, y que de la mano de figuras como Fernando Cavenaghi, "el Chori" Domínguez y David Trezeguet, con "el Pelado" Almeyda en la banca, buscaron salir del lugar en el que nunca debieron estar, y regresar al lugar del que nunca debieron irse.
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