La lucha libre es definida como entretenimiento deportivo, mezcla de combate y artes escénicas, y es una disciplina que lleva años dando vuelta en el intelecto colectivo de la gente desde finales del siglo XIX. Para dar vida al show se necesitan artistas, luchadores, que arriesgan semana a semana sus cuerpos y sus vidas para darnos al pueblo momentos de distensión y emoción, pero estas personas no están hechas de acero ni son irrompibles, son seres humanos de carne y hueso, sufren dolor como nosotros, tanto físico como espiritual.
"Beyond the Mat" es un documental de 1999 dirigido por Barry W. Blaustein, en el cual se sumerge al mundo de la lucha libre profesional, pero vista desde afuera del cuadrilátero, es un relato íntimo de lo que sienten y piensan las superestrellas de la por ese entonces WWF, la Federación Mundial de Lucha (ahora WWE), la promoción de lucha libre más conocida a nivel mundial, con años y décadas de trayectoria, llevando a millones de hogares alrededor del planeta el entretenimiento de mejor calidad. Es un detrás de escena de la multimillonaria empresa presidida por Vince McMahon, heredada por su padre, y de lo que se trata ser un luchador, viajes a través del mundo, entrenamiento físico exigente, pasar días y meses lejos de casa y de la familia, y el riesgo que conlleva ejecutar los movimientos que llevan años entrenando. La película además tiene tres protagonistas principales, además de "Stone Cold" Steve Austin y Triple H entre otros, que hacen pequeñas apariciones, estos son Mick Foley, Terry Funk y Jake "The Snake" Roberts. Los tres con perfiles muy distintos, el primero en la cima de su carrera, el segundo al borde del retiro y el tercero fue un grande de los años 80 y 90 que pelea en circuitos independientes y de poca monta, con una serie de problemas personales como la nula relación con su padre e hija, y la adicción a las drogas, que lo tienen luchando por su vida.
También ejemplos de jóvenes que se preparan para mostrar sus armas en las "grandes ligas", provenientes desde circuitos y promociones amateurs, y la irrupción de un competidor de la WWF por el rating, la WCW, promoción en ascenso y que lucha codo a codo con la Federación por el cariño del público, lucha que sabemos, perdió.
Porque aunque nos cueste entender, la lucha libre es parte de nuestra vida, algunos quizás reclaman por su alto contenido de violencia, pero es imposible negarse a los recuerdos que nos entregó este espectáculo, que traspasa generaciones, y que incluso nuestros padres gozaron con los "Titanes del Ring", el legendario programa nacional de lucha libre, que al igual que la WWF/WWE alucinó a grandes y chicos y a pesar de ser un show burdo y grosero, no podemos vivir sin él. Porque yo soy un fanático de la buena lucha, y quiero que esta actividad no muera nunca, podrá sufrir golpes y caídas, pero ojalá nunca se termine.
Jake "The Snake" Roberts |
Terry Funk |
Mick Foley |